Lo siento, siento haberte conocido!!

Te quiero como no te lo imaginas, y fui tan estúpida al pedirte más tiempo para mí y te portaste más gélido que un glacial flotando en el mar. Tan frío, que mi sangre sintió congelarse tan solo con tu acusadora mirada, como diciendo “ya no mereces que te quiera” y yo sufriendo en silencio por tu rechazo. Tanto te miré y nada te dije, y tanto dije sin mirarte, que ya no entiendo. No puedo borrar los rastros de ti que quedan en mi corazón en forma de recuerdos. Ya no puedo borrar de mi mente tu forma de mirar, que era como la luz que faltaba en el camino a mi casa, ya yendo a dormir, pues estas presente en mi pensamiento todo el tiempo. Mis cinco sentidos dicen tu nombre y ruegan por ti, pero tu estas ajeno a todo lo que siento, y el dolor en mi alma es insoportable, que prefiero seguir caminando en el valle de las sombras otra vez, estar de nuevo en las tinieblas de mi atormentada alma, justo donde estaba yo antes de conocerte. Pero ya es imposible, totalmente imposible dejarte entre renglones y empezar una nueva pagina en el libro de mis vivencias.

Creo que mi cofre de ilusiones rotas se esta llenando demasiado pronto, y solo me queda romper en llanto, y mi corazón se despedaza lentamente, con cada indiferencia tuya, se va partiendo lenta y dolorosamente, y la herida va sangrando a su paso.



prisciiLa*

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